Kriter Blog

El sector Financiero y la economía real

Cosas que debemos saber sobre la educación financiera

El sector Financiero y la economía real

Hace unas semanas el Economista titulaba “España apuesta por mejorar la educación financiera para afrontar un nuevo futuro”. Destaca que “El plan desea resolver algunos de los problemas que la crisis financiera ha puesto de manifiesto y que se hubiesen podido evitar con un “mejor” conocimiento financiero”. Por otro lado, “también busca facilitar la administración y distribución de los recursos de los individuos, que cada vez es más compleja”. La hipótesis de partida del Plan es que las personas con mejor formación financiera tienen mejores comportamientos respecto a las decisiones financieras que toman. De entrada es cierto, pero es algo más complejo.

Educación financiera

A la mayoría de las personas no les gustan los números y tampoco les gusta hablar de dinero. Sobre todo de la falta de dinero. Y no todas las personas arriesgan, así que no necesitan el mismo nivel de capacitación para gestionarlo. Es difícil trasladar la importancia  de capacitarse en temas financieros, para todos aquellos que aún no han sufrido las consecuencias de no estarlo, pero que a lo largo de la vida, sin duda, puede evitarles más de un problema. Es difícil ayudar a alguien a resolver un problema que no sabe que tiene o va a tener.

Josep Soler Alberti, Director General del Institut d’Estudis Financer, le llama la gran revolución pendiente en un artículo publicado a l’Economic “Educació financera contra la fragilitat financera”. Dice Soler Alberti que dicha revolución “se materializará cuando ciudadanos y pequeñas empresas, ahora en una situación de inferioridad manifiesta en contratar productos y servicios financieros, reduzcan la asimetría informativa en relación a los bancos y proveedores financieros a través de la inclusión y la capacitación en finanzas personales, cuando nos decidamos a empoderar a la gente para poner fin, o al menos, limitar la actual fragilidad financiera”.

La complejidad del sistema financiero

La escalada de complejidad del sistema financiero ha provocado una mayor fragilidad financiera. Ya comentamos hace algunas semanas que gestionar el dinero ajeno cambia la perspectiva. Hacíamos mención a John Kay, autor del libro “Other’s people money”. Profundizando algo más en sus argumentos, Kay se replantea la dependencia que todos tenemos como sociedad del sector financiero, y se la cuestiona. Podemos verle en el video de presentación de su libro en el centro financiero de la City, delante de los edificios de algunos de los grupos financieros más importantes del mundo. Tras una reflexión sobre la enorme distancia entre el volumen de transacciones generadas por el sector financiero respecto el volumen total de comercio de productos y servicios, Kay concluye que parte de la rentabilidad del sistema financiero es en realidad una apropiación de la riqueza que se está creando en algún otro lugar en la economía real.    

Todas las economías necesitan finanzas. Necesitamos un sistema financiero que nos ayude a gestionar nuestros pagos, que nos ayude a transferir riqueza a lo largo de nuestra vida así como entre generaciones, que nos ayude a gestionar el riesgo, así como a distribuir nuestro capital. Pero el sistema financiero que hemos creado es mucho mayor y mucho más complejo y mucho menos robusto de lo que necesitaríamos para conseguir estos objetivos.”

La perspectiva mostrada por Kay sobre la distancia entre la economía real y el enorme volumen de transacciones del sector financiero, añaden argumentos sobre la necesidad de educar en finanzas. Aunque el discurso oficial tiende a adjudicar como causa de muchos de los malos comportamientos con el dinero por parte de los ciudadanos la falta de educación financiera, sin hacer hincapié en la nueva complejidad. Siendo la afirmación parcialmente cierta, el enfoque me parece escandalosamente incompleto.

Dice la profesora Lusardi en un simposio reciente de la OCDE: “Las políticas públicas deberían generar resiliencia financiera”. La educación financiera debería enfocarse a todos los niveles para facilitar la vida a las personas. El enfoque que deberíamos esperar por parte de las instituciones es una aproximación a las finanzas similar a la prevención en salud: identificar y promover simples reglas para comportamientos más saludables, educar a los ciudadanos en buscar asesoramiento experto cuando es necesario, y regular con firmeza productos potencialmente tóxicos. Queda mucho por hacer.

Chus Blasco
www.afca.cat
www.linkedin.com/in/chusblasco